Terapia familiar
Terapia familiar
Los niveles que se tienen en cuenta para que la terapia familiar sea beneficioso para sus miembros son los siguientes:
- Cómo se forjó la relación de pareja, su grado de intimidad, roles y pautas sexuales. Se evalúan las habilidades de comunicación y negociación.
- Matrimonio con hijos, las tareas relacionadas con el cuidado y crianza, hacer sitio para ese tercero y redefinición de nuevos roles en el padre y madre. Se evalúan las habilidades de comunicación y negociación.
- Conflictos entre padres e hijos
- Problemas con la educación de los hijos
- Agresividad y enfados reiterativos
- Convivencia con hijos con trastorno de personalidad, o trastorno mental grave como esquizofrenia u otras enfermedades psicosomáticas como dolor crónico, fibromialgia, etc.
- Convivencia con algún miembro de familia con adicción.
- Matrimonio con hijos adolescentes, problemas con la educación de los hijos, flexibilidad, apoyo, reconocimiento de logros profesionales y personales. Se evalúa las habilidades parentales, de comunicación y de negociación.
- Falta de respeto y saltarse las normas de la convivencia
- Problemas de conducta y de comportamiento
- Emancipación de los hijos, aceptación y retomar la pareja. Trabajar el duelo, la negociación y comunicación.
- Decisión de separación y posterior divorcio. Proceso emocional, elaboración del duelo:
- Aparición de terceras personas, desilusión, rupturas familiares, etc.
- Establecimiento de una nueva relación de pareja. Proceso emocional de elaboración de temores y prejuicios, aceptación de una nueva relación. Restauración del apego.
- Situaciones que presentan heridas de apego profundas dentro de la familia, cómo:
- Traumas, abusos, maltrato, abuso sexual por un miembro de la familia, muerte de un familiar o persona querida, hermanastros / as, etc.
Cuando una familia se encuentra con una situación de inestabilidad familiar e incluso en ocasiones insostenible, se precisa de la intervención de un experto en psicología. La terapia familiar pretende dar una visión más objetiva de la situación en familia, a través de la mediación y la comunicación.
¿Para qué sirve la terapia familiar?
El objetivo de la terapia es el de mejorar la comunicación y resolver los conflictos o situaciones que se pueden dar a lo largo del propio proceso de la vida. ¿Cómo?
- Toma de conciencia del problema
- Extraer el deseo del cambio
- Salir de estados pre contemplativos o victimismo pasividad
- Reforzar los aspectos más eficaces que faciliten a la solución
- Ampliar la confianza entre los miembros
- Encontrar la dirección y soluciones
En conclusión, se trata de trabajar todos juntos y pasar desde la oposición a la disposición.
¿Por qué se estanca o cronifica un problema en la familia?
- Las relaciones entre los miembros de la familia se deterioran, es por ello que cuando se interviene a nivel psicológico, la vinculación entre ellos es el punto de partida. Se trata de salvar a las personas frente al problema.
- También, en ocasiones se produce un estado pre contemplativo de la situación familiar, que hace que el problema esté menos reconocido o mal dimensionado.
- La motivación hacia el cambio también aparece como un factor que estanca la solución del problema, a veces es necesario primero verbalizar lo que le ocurre a la persona frente a ese problema para entender como le afecta.
- En ocasiones, pensamos que el cambio puede llevarnos a un desgastes y coste más elevados que mantener el problema. Es esencial reconocer cuales son los costes y beneficios que el problema genera a la familia actualmente.
- A veces, la familia ya no imagina un futuro mejor. Pero, es posible, y en terapia se darán los pasos para sentir ese deseo de cambio.
- Empoderar hacia el cambio, muchos familiares no son conscientes de sus propias capacidades, el despertar sus propias capacidades es la guía para el cambio.
- Incentivar para una responsabilidad compartida. Es bueno que en las familias reflexionen sobre los contenidos que otros miembros narran y sobre la propia relación que tienen entre ellos.
Por lo tanto, la evaluación e intervención en las familias versarán en aquellas dificultades que estéis atravesando. Es importante conocer la historia de cada miembro de la familia porque “El lobo siempre será el malo si sólo escuchamos a caperucita”.
Preguntas frecuentes
A medida que el vinculo de pareja se debilita el de los hijos se fortalece, es bueno que la pareja saque tiempo en común, porque los hijos no son ni lo primero ni lo único.
Discutir no es malo, lo que si es malo para la relación de pareja es expresar opiniones o juicios negativos sobre el otro.
A veces uno de los dos miembros de la pareja asume más responsabilidad en el cuidado que el otro. El otro mantiene una actitud pre contemplativa o ausente. Dile como te sientes, desde el yo y si es importante para ti, busca ayuda de un experto.
Buscad el momento adecuado, tomaros el tiempo necesario, mostraros tranquilos y serenos, dadles tiempo para asimilar la noticia respetando sus emociones y responder a sus preguntas.
Es muy duro presenciar cada día una pelea. La gente que se quiere suele tener peleas. Es normal que las personas que convivan pierdan los nervios y discutan. Si te afecta mucho, intenta hablar con ellos y hablar de tus sentimientos.